La fábrica del silencio.

En el siglo XX vivió un gran resurgir al acoger en su término la Central térmica, que fue en su tiempo la más grande de España, y la primera construida en España para la producción de electricidad a partir de la quema de diferentes tipos de carbón, extraído en las minas locales, y posteriormente traído con camiones de otras minas más productivas. Cerró sus puertas en los años 1980, con el encarecimiento del transporte del carbón; lo que significó el inicio de un largo declinar de la población.
.
.
.
CentralTermicaAliaga00_fotoantigua
Central térmica de Aliaga, Teruel (España), h. 1955. Fachada Noroeste antes de la última ampliación.
.
.
Sus dos primeros grupos, de 10 MW cada uno, entraron en funcionamiento en 1952. Entonces, se trataba de la más importante y moderna central térmica de España, con una sala de calderas de 76 metros de longitud y 36 de altura.

Contaba con un pequeño embalse sobre el río Guadalope desde el que se alimentaba el circuito de refrigeración de la central. Se trataba de un circuito cerrado con torre de refrigeración.En 1958 entró en servicio su tercer grupo, con una potencia de 25 MW, lo que hizo que la producción anual alcanzase los 280 MW/h.  Sin embargo, la produción de carbón de las minas de la zona pronto se vio insuficiente para la demanda de la central (900 Tm).

.

2016_big

El transporte del carbón se hacía por carretera.  Procedía de otras cuencas tulorenses, aumentando considerablemente los costes de producción eléctrica.

.

La central fue un importante revulsivo económico para Aliaga y su comarca que llegó a contar con 2.000 habitantes, muchos de los cuales vivían directa o indirectamente de la producción eléctrica y las minas de carbón.

Arquitectura.
La primera nave de calderas, terminada en 1952, tenía 76 metros de longitud por 36 de altura. El arquitecto de esta primera nave identificó la sucesión de pórticos de hormigón con las columnas de un templo pseudoperíptero, usando los pilares de hormigón a modo de columnas con un estilizado capitel toscano (muy apropiado para las actividades que se desarrollaban en el interior), rematadas por un enorme entablamento con frontón. De esta forma la central térmica queda consagrada en una especie de templo de la energía.
En 1958 se concluye una segunda nave mayor que la primera pero siguiendo su mismo patrón estético. La columnata toscana con su enorme entablamento se repite en las fachadas suroeste (donde se muestra el nombre de la central) y sureste, con su frontón. La fachada noroeste es un añadido posterior (baste compararlo con la foto de cabecera) y consta de un gran cuerpo de ladrillo visto acompañado estilizado por cuatro grandes vanos, mostrando un lenguaje más moderno pero sin abandonar los ritmos generales de la composición.
A pesar de su abandono y deterioro, y de estar despojadas de su maquinaria, las dos naves de la Central Térmica de Aliaga siguen despertando interés por su ubicación en un espectacular entorno paisajísitico y por el propio “sic transit gloriae mundi” de los lugares abandonados. Dos naves de composición clásica, asimiladas a templos que, salvando el tiempo y las distancias, pueden recordar a los templos perdidos en el paisaje de la Magna Grecia.
Fuente: otraarquitecturaesposible.blogspot.com
.
.
.
Arnold Häring – Director de la central térmica
.
Mis datos sobre este lugar son ampliados gracias a que un buen día se pone en contacto conmigo Alberto Haering, nieto de uno de los directores de la central. Alberto me explica la intensa vida de su abuelo, el Sr. Arnold Häring nacido en 1888 en Aesch, un pequeño y pintoresco pueblo suizo cerca de Basilea.
Trabajaba en Brown&Boveri, empresa suiza de componentes e instalaciones eléctricas y posiblemente vino a España para hacer algún montaje en la fábrica Erz en 1918 y le debieron “fichar” durante una buena temporada, así que en los años 20, junto a sus dos hijos, se vinieron a vivir a Zaragoza. En la fotografía que adjunto se puede ver a Arnold Häring entre 62 y 70 años con una actividad laboral plena siendo director de la central hasta 1958. Alberto me cuenta también que fué su padrino, pero lo conoció muy poco, cuando él era muy pequeño, ya que el Sr. Häring murió en 1977.
Me cuenta también que su padre viajaba algunos fines de semana a Aliaga y se quedaban en el chatecito de su abuelo, también recuerda que entraban a la mina por una especie de tobogán gigante.
Fuente texto y fotos : Alberto Haering.
.
.
.
.
Arnold Häring
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Hasta aquí la parte histórica de la central térmica. Os dejo con, el primero, de los tres grandes reportajes que tengo preparado. Son fotos del presente de Aliaga. Una muestra de este monumental abandono que, a pesar de los años, sigue manteniendo un gran encanto
Con todos vosotros, Aliaga, la fábrica del silencio.
 
Camino a la central
Camino a la central

 

Nos dirigimos Umpi, Ricardo y yo a la central térmica de Aliaga. Son los últimos kilómetros que hacemos en una fría mañana de marzo.

Vista general
Vista general

 

Bajamos del coche, hace mucho frío. El pronostico del tiempo anuncia nevadas. Lo primero que hacemos es alejarnos de la fábrica y tomamos los primeros planos generales para hacernos una idea de sus dimensiones.

Vista general
Vista general

 

 

Vista general
Vista general

 

 

Vista general
Vista general

 

 

Vista general
Vista general

 

 

Vista general
Vista general

 

Finalmente bajamos del cerro y nos dirigimos a la entrada principal. El mismo camino que antaño cientos de trabajadores hacían para dirigirse a su puesto de trabajo.

Camino a la central
Camino a la central

 

 

Embalse

El embalse sobre el río Guadalope proporcionaba el agua suficiente para el circuito de refrigeración de la central.

 

Otras dependencias
Otras dependencias

 

 

La sala del bidón
La sala del bidón

 

 

Otras dependencias
Otras dependencias

 

 

Detalles
Detalles

 

 

Detalles
Detalles

 

Después de fotografiar los alrededores de la gran central por fin nos decidimos a entrar. Primero fotografiamos las salas adjuntas hasta que llegamos a las dos grandes naves. Es cuando descubrimos las auténticas entrañas de la fábrica. Donde la actividad era frenética, donde no se respiraba ni un segundo. El calor y una atmósfera asfixiante se mezclaban con el olor a carbón.

 

Escaleras de los papeles rotos
Escaleras de los papeles rotos

 

 

Sala de operaciones
Sala de operaciones

 

 

En la segunda
En la segunda

 

Es en esta planta donde nos encontramos cientos de documentos de los que allí trabajaron. Los encontramos en un estado lamentable. Cientos de años de historia por los suelos. A merced de la humedad, del agua, del polvo.

Documentos pasados
Documentos pasados

 

 

Documentos pasados
Documentos pasados

 

 

Documentos pasados
Documentos pasados

 

 

La gran sala verde
La gran sala verde

 

 

La gran sala verde
La gran sala verde

 

Me dirijo a la planta baja de la gran nave lateral. Una zona que yo la denomino el cementerio

El cementerio
El cementerio

 

 

El cementerio
El cementerio

 

 

El Cementerio
El Cementerio

 

 

El Cementerio
El Cementerio

 

 

El Cementerio
El Cementerio

 

 

El Cementerio
El Cementerio

 

En la fachara trasera de la nave central nos encontramos con el contrapeso y la enorme puerta.

La desplomada
La desplomada

 

Vista de la nave lateral desde el segundo piso.

Gran nave lateral
Gran nave lateral

 

En la parte lateral de esta nave es el lugar que me provoca mas fascinación. En diferentes niveles hallamos dos largos pasadizos llenos de misterio. Donde la entrada de luz por sus rotas y viejas ventanas se va alternando por la casi total oscuridad. Dependiendo de la hora del día o las condiciones meteorológicas del exterior, nos podemos encontrar con un panorama digno de cualquier película de suspense, de misterio. La sensación si además estas solo es brutal y la adrenalina sube por momentos. El ruido del aire colándose por las ventanas quiere ganar por momentos la batalla al silencio mas absoluto. Los largos segundos de exposición dan tiempo a la observación. A decidir cuales serán los próximos encuadres.

 

El pasillo del miedo
El pasillo del miedo

 

 

El pasillo del miedo
El pasillo del miedo

 

 

La sala marrón
La sala marrón

 

 

La sala marrón
La sala marrón

 

 

El túnel del miedo
El túnel del miedo

 

 

El túnel del miedo
El túnel del miedo

 

 

ventana de penumbra
ventana de penumbra

 

Seguimos subiendo por una estrecha escalera de baranda oxidada, hasta llegar justo debajo de la cubierta del edificio. Nos encontramos en la parte mas alta de la nave lateral.

Debajo de la cubierta
Debajo de la cubierta

 

 

Debajo de la cubierta
Debajo de la cubierta

 

 

Debajo de la cubierta
Debajo de la cubierta

 

 

Debajo de la cubierta
Debajo de la cubierta

 

 

Nave central
Nave central

La gran nave central como podéis ver impone por sus dimensiones. Incluimos la figura humana para dar proporciones al lugar. En este caso nuestro amigo Umpi se ofrece voluntario.

 

Nave central
Cubierta nave central

 

 

Nave central
Nave central

 

Conseguimos pasar al otro lado por un estrecho paso (ver a Ricardo) y tomamos las últimas fotografías.

En mitad del paso
En mitad del paso

 

 

Embalse y dependencias
Embalse y dependencias

 

 

Montaña de residuos
Montaña de residuos

 

 

Viena maquina
Vieja maquina

 

 

A través de la ventana
A través de la ventana

 

 

A través de la ventana
A través de la ventana

 

Nos despedimos de Aliaga. Pero habrán muchas fotos mas en diferentes reportajes. Espero que os hayan gustado.

Todas las fotos a tamaño superior en la siguiente Galería.

 

51 replies to “La fábrica del silencio.

  1. Hola Miki, soy Arman, de la expo urbex del sábado. Un blog muy bien diseñado y unos reportajes excelentes. La idea de incluir relatos me parece original y aporta otra dimensión a las imágenes. Felicita a la autora.
    Arman

  2. Felicidades por el reportaje . Mi padre dejo allí sus años de trabajo intenso y duro, gracias a ella, (la central) yo hoy puedo estar donde estoy.

    1. Hola Charo. Me alegro haber encontrado a alguien vinculada directamente a este gran lugar. No dejo de visitarla, prácticamente todos los años. Sus rincones llenos de fuerza, de magnetismo. Leyendo alguna historia, que por desgracia, ahora queda merced del viento, del polvo, de la humedad.
      Papeles bañados aún del sudor de los trabajadores de esta enorme central. El olor a aceite aún se hace presente al estar concentrado en una nueva instantánea, en un nuevo encuadre. Y… mucho me temo, que seguiré fotografiandola.
      Saludos cordiales, Charo.

  3. me han comentado que en la parte superior de la central existen unas pizarras con operaciones matemáticas de física y química intactas, podeis comentarme algo al respecto?

    1. Buenos días, efectivamente Manolo, tienes razón. Las pintadas que comentas corresponden al decorado de la película «La Distancia», que una vez fue rodada se quedó así.

  4. Hola, podriais contestarme algo referente a unas pizarras que se encuentran en la parte superior de la central repletas de operaciones matemáticas. Grácias.

    1. Gran lugar…o lo era. Yo lo visito muy a menudo y siento una tremenda pena ver como, año tras año se va degradando.
      Me encantaría encontrar fotos de cuando estaba en funcionamiento y que gente, como tu padre me explicara sus vivencias en ella.

  5. Hola Miguel, Felicidades por el blog. Ayer me hablaron de este lugar y buscando información he llegado hasta aquí. Me gustaria saber como es el acceso hasta la central en la actualidad, si está vallado o si se puede entrar con facilidad. Hago fotografia nocturna y el lugar es impresionante. Soy de Logroño y quiero asegurarme esas cosas antes de ir hasta allí… Un saludo

    1. Hola JM, me alegro mucho que te guste. Casualmente ayer vi que te contestó un gran amigo mío . Efectivamente, puedes entrar. Como sabes, con el máximo respeto a estos maravillosos lugares.
      Un saludo.

    2. Hola JM, yo tengo casa allí en Aliaga y te puedo asegurar que puedes visitar la Central sin ningún problema, con prudencia por ser un lugar abandonado. Pero el acceso es muy fácil.
      Además, Aliaga tiene preciosos lugares que fotografiar.
      Entre ellos los lagillos de las minas de campos que alimentaban esta central.
      Y seguro que la gente de la zona te ayudará a localizar esos lugares.
      Un saludo

      1. Un simple paseo y constatar el abandono tanto de la central como el pantano, por cierto, la sequía ha hecho mella en toda la zona

      2. Cierto Charo. Estuve este verano. El estado de abandono es muy muy acusado. Da mucha pena verla así. Supongo que para los que allí trabajaron se les partirá el alma.

  6. Yo naci en el barrio , pase mis 21años alli mi padre trabajo en la Central cuando estaba en todo su rendimiento hasta que se jubilo.
    Que pena verla asi .
    Un saludo a todos

  7. Mi familia tiene casa en Aliaga y voy muy a menudo por allí.
    Gracias por el reportaje.
    Me ha gustado mucho.
    La alcaldía tiene un proyecto para intentar recuperar de alguna manera la central.
    A ver si lo consiguen!!!
    Un saludo

    1. Hola Francisco, ojalá hagan lo que comentas. Realmente este verano la he encontrado muy muy deteriorada. Aliaga envejece a pasos agigantados.
      Ah, y me alegro que te haya gustado el report!

  8. Hola Miguel, sobresaliente tu reportaje de la Central Térmica de Aliaga!! El día 23 de febrero estuve por sus inmediaciones y da pena contemplar el abandono en que está… Lamentable que no se sometan estas instalaciones a conservarlas lo mejor posible para poder ser visitadas ya que son referente de la historia de un país y su industria energética… Recibe un abrazo y te felicito por tu trabajo…

    1. Hola Ángel, me alegro que te hayas pasado por el lugar y me apena que lo hayas encontrado en ese estado tan lamentable. La verdad es que casi cada año suelo acercarme y veo como poco a poco va languideciendo y nadie hace nada para detener un deterioro incesante, que esté sumida en un olvido casi absoluto, a la suerte de los agentes atmosféricos y del vandalismo.
      Pienso que de la misma manera que existen museos mineros por la zona, sería una buena idea realizar en ella una «módica» rehabilitación y poder hacer visitas guiadas a este magnífico lugar. Las personas, ahora mayores, que trabajaron en ella seguro que lo agradecerían, pero… pienso que ya es demasiado tarde.

      Gracias por tus comentarios. Un abrazo.

      1. Habria que celebrar un dia al año , o bien su inauguracion o su cierre para darle mas voz a ese monumento de la ingenieria.

      2. Supongo que la administración ni se plantea una futura reforma. ALIAGA está condenada a una lenta agonía, es una pena. Debe ser muy triste para los mayores del lugar, que pasaron media vida trabajando en ella y se acercan de vez en cuando para observar con tristeza como languidece.

  9. Muy interesante el reportaje, una pena observar el deterioro de las instalaciones que han sido «el alma» de la economía de la comarca y sus gentes, que supongo lo verán con gran pena. Me quedo como pendiente esta visita y por su puesto fotografiarla, saludos.

    1. La he visitado hoy y me he quedado muy impresionado. Me encantan estos lugares y llevo ya unos cuantos, os puedo decir que el estado es envidiable para llevar casi 40 años cerrada. Las ventanas, las taquillas, escaleras, casi total ausencia de grafitis.
      Seguramente hace unos años con más enseres y cristales, impresionaría aún mas.
      En fin, espero que hagan algo con ella. Simplemente frenar el deterioro.

  10. Hace un año encontré 5 fotos antiguas y papeles en casa de la Central Térmica de Aliaga. Desde entonces he tenido muchas ganas de ir a visitarla. Ayer por fin pude ir. Es impresionante el entorno y la central. Una gran pena el estado total de abandono. Por los documentos del año 1957 se que mi abuelo era el director de la Central. El reportaje me ha encantado. Las fotografías reflejan perfectamente cómo esta. Gracias Miquel1967

    1. Hola Alberto, es un placer encontrar a personas cuyos familiares trabajaron en esta enorme central, en este caso el director de lo que fue esta central térmica. Serìa también magnifico si pudieses enviarme escaneadas estas fotos y alguno de estos documentos, así los incluiría en mi reportaje fotográfico y lo podrían ver muchísimas personas. Entiendo también que son documentos muy personales y quizás prefieras no hacerlo. Espero tus noticias Alberto y de nuevo gracias! Tengo aún algunas fotos en mi archivo para ampliar el reportaje que tengo, quizás también con tus fotos. 🙂
      Un abrazo.

      1. Buenas tardes Miquel,
        dime como puedo hacerte llegar las fotos y te las envió.
        Tengo alguna del interior en funcionamiento, otra que debe ser del día de la inauguración y 3 de exteriores, dos de ellas cercanas y otra desde una posición elevada y lejana. Todas son de los primeros años de funcionamiento.
        Un saludo a todos

      2. Ufff que bueno Alberto. Muchísimas gracias!
        Envíamelas a rayapera@gmail.com
        Dime tu apellido y comentaré que has tenido la amabilidad de enviármelas y que tu abuelo fue su director. Y por supuesto envíame si quieres documentos que creas que son de interés. Muchas gracias!
        Un saludo.

      3. Hola Miquel
        Ya he visto que has colgado las fotos. Si encuentro alguna mas te las enviare.
        Del texto escrito solo apuntar que mi abuelo debio ser director hasta 1958 (70años de aquella epoca).
        Muchas gracias

  11. Me crea mucha nostalgia. Nací en mil 1948. Era algo muy grandioso dando lo mucho que se necesitaba en los pueblos para su desarrollo, la electricidad.
    Tuvimos una infancia feliz,
    Gracias por este esmerado trabajo, nos hace pensar en una idea muy cierta… “de joven vives de ilusiones, y….. ahora de mayor de bonitos recuerdos. Como lo fueron para mi, aunque dejé allí a mi querida madre. Saludos que sois muchos.

    1. Hola Miguel encantado de conocerte. La verdad es que a esa fábrica le tengo mucho cariño, fue de los primeros lugares que visité y no dejo de ir casi cada año, es muy triste para mi pues veo su en ella su rápido deterioro, por desgracia no puedo decir un vello envejecimiento. Al estar dentro siempre me imagino la gente que trabajaban en este enorme lugar, por eso me llena de alegría cuando me escribe gente como usted diciéndome que vivió en Aliaga (desconozco si llegó a trabajar allí). Si fuese así sería un placer que pudiese documentar algunas de mis fotografías pues muchas veces son solo eso, imágenes. Para usted es algo más, imágenes acompañadas de muchos y muy buenos recuerdos, ya tan solo por eso vale la pena hacer esto. Miguel no dude en escribirme y «empaparme» de información sobre la Fábrica (ahora) del silencio.
      Un abrazo!

Replica a Ramo Cancelar la respuesta

close-alt close collapse comment ellipsis expand gallery heart lock menu next pinned previous reply search share star